En el siguiente gráfico representamos cómo funciona la supuesta democracia actual (representativa) y cómo propone Democracia Directa Digital (D3) superarla:
Explicaremos lo que queremos representar en esta animación:
- En primer lugar vemos cómo funciona la presunta democracia actual, es decir, el sistema parlamentario de partidos.
- Los ciudadanos supuestamente soberanos tienen una opinión sobre un determinado tema. Unos están a favor y otros en contra. En el ejemplo que vemos en la animación, la opinión mayoritaria en la sociedad es a favor: p.ej. de la dación en pago para resolver la situación hipotecaria de miles de familias en el país, o cualquier otro tema.
- Esa opinión mayoritaria, esa decisión si fuese soberana, debería ser elevada a los parlamentos por medio de los partidos. Pero, como sabemos, estos no nos representan, y su voto en los parlamentos no suele coincidir con lo que votaría mayoritariamente el conjunto del pueblo en un referéndum.
- En lugar de eso, vemos que la opinión que cuenta es la de los verdaderos mandamases en nuestra sociedad: aquí podríamos incluir a potencias extranjeras, organismos internacionales como el FMI que chantajean a los partidos y los gobiernos, las grandes empresas, las organizaciones patronales, etc. etc. Quiénes son exactamente en cada caso los que deciden las cuestiones de relevancia en el país no es lo importante: lo importante es que no somos nosotros. Es decir, el pueblo no decide, no pinta nada, no es soberano #EstoNoEsDemocracia.
- Esas decisiones impuestas desde arriba, encuentran su cauce en los partidos tradicionales, que mayoritariamente se encargan de trasmitir esos votos en las instituciones. En este caso, deciden en contra del pueblo: NO. Y ese voto se convierte en ley en el Parlamento, y en acción de gobierno.
- ¿Cómo propone D3 solucionar este bloqueo sistémico a la voluntad popular?
- D3 propone convertirse en un puente que trasmita obligada y permanentemente la voluntad de los ciudadanos, comprometiéndose por estatutos y programa electoral a votar en el Parlamento aquello que mayoritariamente decidan los ciudadanos.
- En este caso, aunque otros organismos decidiesen NO, el voto mayoritario del pueblo sería SÍ y eso sería convertido en ley a través de D3. Si el gobierno está condicionado por una mayoría de diputados de D3, ese SÍ de los ciudadanos se convertiría en acción de gobierno.
- Esta es la propuesta de D3: puentear a los partidos, para evitar su acción de bloqueo y usurpación permanente de la soberanía popular.
Esta es, en nuestra opinión, la manera más rápida y directa de lograr una Democracia Real: posiblemente la única que esquivaría los obstáculos mediáticos y del poder antidemocrático que impone hoy en día las reglas del juego. Es la Revolución por la Democracia. ¿Te unes?
Digital2 es miembro fundador de D3. 
Muy bueno, fácil de entender y directo. Como debería ser el sistema político.
Hombre, faltaría explicar que pensáis establecer ese puente mediantes Internet. Pero está bien: en una sola imagen habéis resumido la fuente de todos los problemas que vive a nivel político nuestro país y en realidad cualquier democracia parlamentaria occidental.
Me parece muy claro el esquema.
Otra manera de establecer ese puente, es creando una red de centros para la democracia directa. Se trataría de instalar en lo que actualmente son los centros cívicos o similares de Barrios y Pueblos, conexión directa con las consultas pendientes de decidir en cada momento.
Estos centros harían también la función de informar a los ciudadanos de manera independiente a los medios sobre las consultas pendientes, las posibles futuras consultas y propuestas para nuevas consultas populares.
También podrían generarse en estos centros debates populares para que todos expresen sus ideas sobre las consultas y las puedan contrastar con el resto de conciudadanos.
Serían unos colegios electorales permanentes, esto facilitaría el acceso de todos los ciudadanos a la democracia directa, aunque no tengan internet en casa.
Otra función de estos centros podría ser la alfabetización digital de la población. Promover que la ciudadania tenga la libertad de recibir información independiente, los hará más libres para tomar decisiones y fomentará la participación y el sentirse parte y todo de ciudad, pueblo, país o nación.
Hola, David. Efectivamente esa idea de centros o locales está presente en la propuesta de D3 desde sus orígenes. No queremos limitar la Democracia Directa a Internet o a la tecnología, para facilitar el acceso a todo el mundo y evitar la brecha digital entre generaciones. Es decir, no queremos ser un «partido de Internet» 😉
Gracias por tu descripción. Creo que convendría incorporla de alguna manera a la descripción del Sistema D3 en el Demowiki. ¿Te animas?
Me animo!
Interesante, pero se me ocurren bastantes objeciones a este sistema. La más obvia es que esas empresas que ahora ejercen de lobby ante los partidos políticos trasladarían su presión hacia los ciudadanos manipulándolos para conseguir que opinaran lo que les interesa. Desde luego, en ese esquema quietas y conformes no se quedarán.
Buena, observación, Estupor. Efectivamente el problema de la manipulación a través de la publicidad y los medios es otro aspecto vital para una Democracia Directa Digital como la que propone D3. Y lo tenemos en cuenta desde nuestra fundación como la otra cara de la moneda del sistema D3: para nosotros, sin medios de comunicación bajo control ciudadano, no habría tampoco auténtica democracia.
En la IV Asamblea que se está desarrollando estos días en nuestro foro de afiliados, estamos precisamente debatiendo propuestas para concretar este aspecto de nuestro modelo.
Si no se ha reflejado en el esquema es por ser este una simplificación. Convendría, eso sí, hacer otro para explicar cómo poner bajo control ciudadano los medios y así evitar la manipulación de los poderes no democráticos sobre la configuración de la opinión pública.
Es decir, en efecto, el dotarnos de un antipartido troyano como D3 para introducir la Democracia Directa en las instituciones parlamentarias representativas, no bastaría: se necesitaría en paralelo poner bajo control ciudadano los medios públicos de comunicación así como potenciar los medios ciudadanos creados desde abajo (radios comunitarias, Internet, etc.).